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Intraemprendimiento como modelo de innovación

¿Por qué está el intraemprendimiento tan de moda y por qué lo va a estar aún más cuando pasen estas semanas de cuarentena y encierro en casa en las que nos estamos viendo? Muy sencillo: porque, por una parte, el intraemprendimiento como modelo de innovación permite a las compañías seguir innovando, y a los empleados “emprender” con menos riesgo, ya que pueden buscar y crear nuevos productos y servicios, pero teniendo el amparo y el apoyo económico y material de la compañía.

¿Cuál es el perfil del intraemprendedor?

Si en tu equipo cuentas con una persona curiosa (su máxima es “¿por qué?” “¿para qué?”), que se pone manos a la obra fácilmente, que se enfrenta a los proyectos con valentía y ganas, que es colaboradora y sabe trabajar en equipo, que analiza los procesos y piensa en el ciclo completo, y cree que siempre hay algo que se puede mejorar… ¡estás de enhorabuena, tienes ante ti a todo un perfil de “intraemprendedor”!

Y es que los intraemprendedores, tal y como dice Gifford Pinchot (“padre” de este término), son los soñadores que hacen las cosas (sí, tienen una idea y la ponen en marcha, estando implicados en todo momento y sintiendo que han de estar ahí, vinculados con su idea desde el inicio hasta el final); son, para una compañía, lo que un emprendedor es a su startup, es decir, todo; y además, son (en muchas ocasiones), el motor del cambio social (buscan que su producto o servicio genere un beneficio para la sociedad).

¿Estás planteando embarcarte en un proyecto de intraemprendimiento como modelo de innovación?

Viendo esto, ¿qué empresa no se animaría a montar su propio programa de intraemprendimiento como modelo de innovación? Son muchas las que lo han hecho (y eso nos da para otro post), pero si te lo estás planteando, te sugerimos estos consejos:

  1. Implica a los directivos de tu compañía: si creen en el proyecto, lo apoyarán.
  2. Implica a tus empleados: confía en el equipo… harás que se sientan más involucrados (se sienten escuchados) y estarán más fidelizados (déjales sentir que son los “dueños” del proceso y verás que, al darles esa responsabilidad, su respuesta será aún mejor).
  3. Ten claro el proceso a seguir: quiénes van a participar, cuándo arranca, cuánto tiempo se va a dedicar…
  4. Y, sobre todo, asume que estos proyectos pueden salir bien… o no tan bien. Lo importante es aprender (salga bien o mal), para poder seguir evolucionando.

¿Crees que puedes tener un proyecto intraemprendedor entre manos, pero no sabes muy bien cómo llevarlo a cabo? ¿Quieres que hablemos acerca de cuál sería la mejor aproximación? Si quieres saber más acerca de cómo podemos ayudarte a desarrollar tu proyecto de intraemprendimiento, ¡contacta con nosotros!

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